Numerología de las tradiciones abrahámicas
Por Nikos VARDHIKAS
(Vers la Tradition)
Tomando como base el artículo de R. Guénon "Remarques
sur la production des nombres" (La Gnose, Junio Agosto 1910, reimpreso en
"Mélanges", 1976, pp. 58-68), podemos establecer para las tradiciones
abrahámicas tablas basadas en su concepción de la divinidad y los símbolos
dominantes de cada rama (que consideraremos como indicando el método particular
de cada tradición), y así concluir en su finalidad.
Judaísmo:
Divinidad: 1 - Símbolos: 6,7 (estrella de David y menorah) -
Finalidad: 7 (6 + 1), 8
Cristianismo:
Divinidad: 3 - Símbolos: 4,7 (cruz y crisma, inscritos en un
círculo) - Finalidad: 7 (3 + 4), 10 (adición) 12,3 (multiplicación)
Islam:
Divinidad: 1 - Símbolos: 8,10 (: 2) (dos cuadrados anidados,
media luna + estrella) Finalidad: 9,11 (6)
Llegamos a las finalidades añadiendo el número de la
divinidad con los símbolos de la tradición. El cristianismo es la única
tradición para la cual, debido a su divinidad "dinamica" (1 = 3),
también es posible multiplicar símbolos y divinidad.
El 10 como la finalidad del cristianismo no sólo sale del
7+3, sino también del hecho de que el 4 es el tetraktys, ya que el 3 proviene
de la serie 1-2-3 de la Trinidad. Por eso se considera que el propósito
dominante del cristianismo es el décimo y no el séptimo.
Hemos indicado la manera en que se producen los números,
para diferenciar su simbiosis; el cristianismo comparte con el judaísmo un
propósito "7", pero se produce de una manera diferente.
Utilizando la interpretación de los números del mencionado
artículo de Guénon, podemos hacer algunas observaciones.
Judaísmo
Representa una continuidad notable: 6,7,7,8 entre su método
y su fin. La presencia de 7 en las dos "rúbricas" refuerza aún más
esta homogeneidad.
El judaísmo se presenta como una forma de cubrir todo el
mundo manifestado, por lo tanto como una forma natural basada en un método de
este mundo, y por lo tanto necesariamente ritual. Parece que es él, más que el
Islam que se vuelca al futuro, quien es el más rico en "alabar" y
recordar a Dios a quien debemos nuestra existencia.
Cristianismo
Se basa enteramente en la manifestación de la Palabra en la
naturaleza, y es, por lo tanto, un camino del corazón que puede ofrecer un
"atajo" para salir del camino completamente natural.
(Comienza en 4: el Verbo manifestado; termina en 10: la
manifestación total del ser. Su divinidad, el 3, es la divinidad manifestada,
aunque no todavía material.
Es, por lo tanto, en realidad, la vía "media",
como lo es cronológicamente también (1).
Su método (el Principio de Creación en éste) parece indicar
la participabilidad en lo divino.
Si uno admite sólo 6 para el crisma (ponemos 7 porque
generalmente está en un círculo), las conclusiones finales no cambian mucho.
Por otra parte, si aceptamos la multiplicación símbolos y divinidad,
tenemos 4 x 3 = 12 (ciclo completo) y 6 x 3 = 18 = 9 (manifestación material
completa - comienzo del Islam) o 7 x 3 = 21 = 3, alcanzar la divinidad (manifestada y no
manifiesta, es decir, la divinidad "inteligible", pero no pura no-manifestación).
7 x 3 indica la naturaleza en los tres mundos, es decir, la
naturaleza en los tres mundos, es decir el fin de los pequeños misterios.
6 x 3 indica la creación en los tres mundos, es decir, el
principio de los pequeños misterios.
Con esta multiplicación (= uso del atajo transformador
cristiano), el cristianismo sobrevive al Islam en el siglo futuro; de lo
contrario, se extingue antes. Por supuesto, como ésta es una forma esotérica,
habría sobrevivido de todos modos, pero aquí se nos dice que sólo ella
sobrevivirá. Cabe señalar aquí que el Islam considera a Jesús como el profeta
que volverá el día del juicio.
Islam
Desde el principio, uno puede notar una "secuela"
en los objetivos de las tres tradiciones:
El Islam comienza en el 8 donde termina el judaísmo, pero
también en el 10 lugar donde termina el cristianismo. Esta doble salida del
Islam sobre los objetivos de los otros dos monoteísmos confirma su carácter
como la última religión revelada.
La misma conclusión se impone por las dos finalidades del
Islam:
El 9, que indica la finalización de la creación y un ciclo
completo (pero parcial, siendo el ciclo más general simbolizado por el 12).
Y el 11, que indica el paso al siguiente ciclo.
El método del Islam (final de la Creación y Manifestación
total del Ser) parece ser, como su finalidad, un método de conservación hasta
el final del ciclo. Es, por lo tanto, el mínimo necesario al final de los
tiempos para la "salvación".
Islam y cristianismo
El hecho de que el 10 del islam esté representado por un
semicírculo con su centro, mientras que el décimo cristiano proviene del
desarrollo de los tetraktys indica, además, que el islam no constituye, en
sentido estricto, una culminación del cristianismo, sino más bien una
rectificación (obviamente reductora) de un cristianismo desviado.
Cristianismo y
Judaísmo
Comparten, como método, el 7 (6 + 1) o el 6 según si el
crisma está en círculo o no.
Esto indica un ordenamiento (ritual?) de la creación, las
fuerzas naturales que recuerdan su principio.
La judeidad de Jesús y el Antiguo Testamento comúnmente
aceptado refuerzan esta conclusión.
En sus finalidades, las dos tradiciones comparten el 7 de
nuevo, producido de manera diferente (6 + 1,4 + 3). Se trata siempre de ordenar la creación, pero el cristianismo
innova recordando la presencia de la divinidad en la creación y lo inverso
(deificación), donde el judaísmo se contenta con afirmar que su método es su
finalidad: la doxología perpetua.
Judaísmo e Islam
Se completan en tanto que principio y fin de la creación
material y se afirman como vías naturales y devocionales, inaugurando y
clausurando la revelación.
Si, desde ciertos
lados, se puede hablar de continuum, el judaísmo que va de 6 a 8 y el Islam de
8 a 11, no hay que olvidar el terreno cristiano, del 4 (antes, pues, del
principio de creación material pues “Antes que Abrahan fuero yo soy”) al 10; el
cristianismo constituye así una tradición a la vez de acuerdo con las dos otras
y profundamente original en relación con ellas, en cuanto a su método que puede
ser "abrupto". Se nos recuerda aquí, por tanto, la posibilidad que el
cristianismo nos brinda de superar a la naturaleza, ha existido desde antes de
la existencia misma de esta tradición.
Las tres tradiciones, en cualquier caso, no parecen estar
interesadas en una visión "global" que vaya más allá del mundo,
aunque se puede decir que el cristianismo va más "hacia atrás" (antes
de la manifestación) y el Islam más "hacia adelante" (después del fin
del ciclo). Paradójicamente, es el judaísmo, la primera tradición desde un
punto de vista cronológico, la que parece ser la más arraigada en este ciclo.
La conclusión más interesante nos parece ser la que se
refiere al propósito de las tres ramas abrahámicas.
El judaísmo aparece como el que ordena la vida aquí abajo
para vivir bien, recordando sus orígenes: el cristianismo propone un camino
unitivo: el Islam constituye el viatico mínimo para el más allá.
Finalmente, a pesar de nuestra costumbre de hablar del
continuum "Judeo-Cristiano", el concepto de judeo-islamismo también
debería ser inventado. Entre las dos ramas semíticas del monoteísmo, hay mucha
más "continuidad" que el judaísmo y el cristianismo; este último
"desarrolla" la enseñanza judía hasta sus límites (cf. Las analogías Génesis/Éxodo con
encarnación/resurrección o víspera con María, etc.), pero al hacerlo innova
mucho más que el Islam que aparece como un "retorno" al fitrah semítico, simplificando y
nivelando, deshaciéndose de las sutilezas "griegas" que también son
sinagógales.
He aquí lo que Guénon dice sobre los números que nos
interesan aquí:
3 Manifestación del Ser-Unidad (1),
la única a través del cual podemos concebirlo.
4. Expansión total de la primera manifestación de la Unidad
receptora, el Verbo Manifestado, Adam Kadmon, Emanación; de ella derivan todos
los otros grados de la manifestación del Ser (1 + 2 + 3 + 3 + 4 = 10).
6 Consecuencia necesaria del ternario (1 + 2 + 3 = 6); punto
de partida de la Creación.
7 Símbolo de las fuerzas naturales, Creación revestida de
formas.
8. Realización material, límite de la manifestación del Ser,
el Mundo material, Equilibrio, límite en las distinciones que creamos entre las
cosas.
9 Multiplicidad, jerarquía de los tres mundos.
10 Manifestación total del Ser, pleno desarrollo de la
Unidad, la Unidad realizada en la multiplicidad.
Podemos elaborar el siguiente esquema, en cuanto a los
métodos y propósitos de las tres religiones, teniendo en cuenta que no tiene
nada de cronológico:
3 4
5 6 7 8 9
10 11 12
0 0
• • JUDAISMO
• 0
0 0 • • • CRISTIANISMO
O • o • ISLAM
o= método • = finalidad
NOTA
1 - Sobre este tema (la
vía del medio), ver la discusión entre el emperador Manuel Il Paleólogo y un
turco Mudarris, Ankara, en 1390/1 o 1391/2.
Edición y traducción de la 7ªme controversia por
Théodore Khoury, CERF (Sources: Christiannes Nº115), París 1966.
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